Hoy he leído en el Heraldo que ha cerrado uno de los establecimientos más emblemáticos de la calle Alfonso: Bolsos Gracia. Según algún comentario, el motivo puede ser el precio del alquiler, pero seguramente, será el de casi todos los cierres, nadie puede hacer frente a los gastos diversos que un pequeño comercio tiene que soportar.
Por aquí ocurre lo mismo. Hace unos días fui al cento de la localidad y me quedé perplejo ante el cierre de comercios que hace un tiempo eran florecientes. La mayoría están cerrados y unos pocos son tiendas de las antiguas "Todo a cien". El aspecto de la ciudad es patético.
En el Paseo Marítimo, algunos bares de toda la vida han sido sustituidos por comercios chinos o están en situación de "Se alquila"; los que subsisten, se las ingenian para poder vender poniendo precios irrisorios -ya os comenté en otro post lo de las jarras de cerveza a un euro o lo de caña y sardina a la plancha, 1,5€-. Por otra parte, el turismo ha disminuido notablemente y los hosteleros están que se suben por las paredes.
Resumiendo, una ruina.
Para ampliar la noticia:
(La foto es de www.heraldo.es. Por cierto, ¿de quién es esa escultura? ¿Qué representa?).
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