DIARIO

Tras dos días de parón por razones técnicas y de otra índole, voy a intentar hacer un pequeño resumen del tiempo que llevo por el pueblo.
El viaje del 26, sin problema alguno. llegué antes de lo previsto. Tras saludar a mis hermanos y cuñadas, salí al bar del Chispa. Allí estaban los habituales: Capapé, Vicente Medrano, Javier el Setas, José el Arilla, el Alfonso, José el Polito, Manolo el Careto, Bartolo, Manolo el Pocho, el Chulo de Plasencia y, por supuesto, Ana, la camarera rumana. Unos vasos y a las 9 a casa. La gente se recoge en el horario de las gallinas.
El 27, fui a Alagón para hacer algunas gestiones bancarias y, sobre las 12,  al bar. Saludé a más gente: Santiago el Veterinario, Luis Sierra, Correas el de Urrea, Rabal  pequeño y Justo el Chispas y Mercedes, su mujer. Por la tarde, al Alcampo con Manolo, acomprar alguna cosa para la inauguración de la Peña y para fin de año. A la vuelta conocí la cueva. El trabajo realizado es digno de admirar. Alta, espaciossa, cómoda y, sobre todo, limpia y cercana. De allí, al bar. Después me hice unas borrajicas para cenar y unpoco de tele y a la cama.
El día 28 fui a Zaragoza. Había quedado con mi amigo José Antonio Zaragozano (Chupi) para saludarnos tras un año sin vernos -aunque sí guaseamos-. Después de dar más vueltas que un pirulo para aparcar, sin consguirlo, decidí meter el coche en el boquete de la Plaza el Carbón y allí se quedó hasta esta mañana -19,10 € me han cascao. Pasé por el Continental para almorzar tortilla con ajos tiernos y me dirigí a dos o tres bancos a solucionar lo que no pude hacer en Alagón. Una vez hechas las gestiones fui a La Bellota, en el Paseo de las Damas. El mejor taco picante de Zaragoza, allí. Llegó J.A.Z. y nos fuimos a un bar de un ex-futbolista del Zaragoza llamado Gori -como el bar- situado, creo en San Vicente Mártir. Reservamos para comer -un ranchico-. Me llevó el Chupi a un bar que yo había oído, pero no estado: "El Puerto de Santa María", en Cesareo Alierta. Después estuvimos en la zona de Francisco Vitoria y, de allí, a comer.

Tras la comida, buena y barata, a Tenor Fleta a ver a mi tía Carmen y a mi prima C. Marín. Eché una cabezada y mi prima y yo bajamos al Tubo a tomar unos chatos. A casa de mi tía a dormir y, hace un rato, he llegado al pueblo y me he puesto a escribir este rollo patatero.

Esta tarde la inauguración de la Peña y cena de los socios -ternasco y sanví de panceta a la brasa-.

(Arriba, rótulo del bar "El Puerto de Santa María". Tiene una estupenda terraza que ayer, al solecito, estaba repleta. Abajo, escaparate del bar "Texas", en El Tubo -obsérvense las madejas, los calamares, los sesos rebozados, las longanizas y sus afamadas patatas bravas-).