El domingo por la mañana fuimos andando por Hortaleza hacia
la Gran Vía y subimos hacia la plaza de España, aunque cruzamos en Callao, pues
oímos unos tambores en la plaza del mismo nombre. Se trataba de una batucada
formada por mujeres que protestaban por las míseras condiciones de las
empleadas de hogar. Subimos por Preciados y en Tetuán, hicimos una parada en “Casa
Labra”, que data de 1890 y es famosa por que allí se fraguó el nacimiento del
PSOE. Tomamos la clásica tapa de bacalao –como la del “Revuelta”, pero a mitad
de precio, aunque la del primero está bastante mejor-. De allí nos dirigimos a
una Puerta del Sol atiborrada y por la calle Mayor, nos dirigimos hacia la
plaza del mismo nombre, repleta de puestos de coleccionistas de monedas, sellos,
chapitas, pines, barajas, cromos, pequeñas antigüedades… Nos tomamos una caña
en “Corrientes” mientras esperábamos a Virginia y Álvaro y luego nos sentamos
en una terraza a hacer tiempo para ir a
comer. La temperatura era agradable y se estaba muy bien al solecito, aunque la
factura nos cambió un poco el semblante. De nuevo fuimos a la calle Las
Fuentes, pero esta vez a un japonés. Tuvimos que hacer una pequeña cola para
entrar, pero mereció la pena, pues la comida fue estupenda. Tomamos unos maquis
y ramen, -esa sopa de fideos largos tan
peculiar- que estaba exquisita. Al terminar la comida nos despedimos y nosotros
nos fuimos para el hotel y ellos para su casa. Descansamos un rato y sobre las
7:30 llegaron Yolanda y Santos. Tomamos unas cervezas por Chueca y sobre las
11:30, nos retiramos a descansar.
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