Bielsa: el túnel, un valle encantado y el carnaval soñado
Varias veces os he hablado de que hay algunos pueblos que me han marcado a lo largo de mi vida. Además de Bardallur, un pueblo burgalés llamado Bilbiestre del Pinar y otro oscense, Bielsa, los mantengo en mi retina de mi época adolescente. En ambos estuve de campamento varias veces, en el primero, cuando tenía 12 y 13 años y, en el segundo, cuando ya era un muchacho de 14, 15 y 16. Del Valle Pineta me acordaré siempre y, de mi escalada a Monte Perdido, con más énfasis. También de las andadas que nos pegábamos todas las tardes desde el campamento a Bielsa (6 Km de distancia, tanto para la ida como para la vuelta). Después, de mayor me he acercado un par de veces y me sigue impresionando igual que de joven.
De Vejer y Conil no os hablo, ya lo he hecho en varias ocasiones.
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