BLOG DIVULGATIVO

miércoles, 26 de junio de 2019

ABDICACIÓN DE ISABEL II




La Revolución de 1868 (caricatura) le pilló a la reina Isabel II -"la de los tristes destinos"- en San Sebastián, donde pasaba el verano. Huyó en tren a Francia y recibió el apoyo de Napoleón III y Eugenia de Montijo, residiendo en París en el Palacio de Castilla, un antiguo hotel de lujo que usó la reina y su corte hasta su muerte en 1904 -este establecimiento pasó después a ser el hotel Majestic hasta 1940, sede de los nazis hasta el 44, de la Unesco hasta el 58, Oficina del Ministerio de Asuntos exteriores de Francia hasta 2007 y Hotel Península en la actualidad-. 

Dos años más tarde del exilio a Francia de Isabel, es decir, en 1870, y tal día como hoy, abdicó (imagen) en su hijo Alfonso XII ante un nutrido grupo de autoridades españolas. A pesar de que su hijo, mediante la Restauración, lograse conseguir la corona, ella nunca volvió a España.

Desde que fue derrocada en el 68 mediante la Revolución conocida como "La Gloriosa" o la "Septembrina", dejó de vivir con su marido Francisco de Asís Borbón, que era más conocido por "Paquita", Doña Paquita, Paquita Natillas o Paquito Mariquito, además de gustarle los baños, los perfumes, las joyas y las telas finas. Francisco vivió en Épinay-sur-Seine, una pequeña localidad cercana a París hasta su muerte en 1902. Fue enterrado en El Escorial, lo mismo que su esposa dos años más tarde.

Así pues, Isabel vio desde su dorado exilio francés, la exigua monarquía de Amadeo de Saboya, la también corta duración de la I República, del reinado y muerte de su hijo Alfonso XII, de la regencia de su nuera María Cristina y del reinado inicial del reinado de su nieto Alfonso XIII.

La promiscua reina murió en su alojamiento del Palacio de Castilla parisino en 1904, siendo trasladada al Monasterio del Escorial junto a su marido.

No hay comentarios: