LOS “JUEGOS” DE MI INFANCIA.-
La diversión de los niños y niñas de hace casi 50 años era variada, mucho más que ahora, limitada a la TV y a las consolas y algún que otro juego esporádico de mesa o de muñecas “fashion”. Eso sí, la de los niños diferían sustancialmente de la de las niñas.
Los juegos de los niños solían tener un componente violento y, a veces, incluso cruel. Vamos a citar alguno de ellos:
. La taba: La taba es el hueso conocido como astrágalo. Era de ganado ovino y tenía 4 partes: hoyo, tripa, verdugo y rey. Se practicaba entre varios jugadores y ay de aquel que cuando tiraba el hueso le salía tripa. El rey, que había conseguido la “corona” gracias a una afortu
nada tirada, ordenaba al verdugo que le golpease con la correa en las manos colocadas juntas haciendo un hueco con los pulgares pegados. Generalmente se pedía que el correazo sonase, caso de no hacerlo, el verdugo perdía su privilegio y pasaba al golpeado. Otra "tortura" era “la toalla” que consistía en frotar con la correa en el cuello del desgraciado jugador con fricción apasionada. Normalmente jugábamos en el rellano de la casa del tio “Sardinero”, frente a la escuela, donde venía “El Escalera” de Bárboles a cortarnos el pelo.
. Las vacas: Un muchacho hacía de vaca y el resto tenía que evitar ser “corneado” en el culo con los palos que portaba en sus manos. El moratón duraba varios días si te pillaba la “vaca”. Benito Fornier, “El Chico Malo”, hacía casi siempre de temido pitoneador. El lugar solía ser junto a los Ayuntamientos y las ventanas del entorno, nuestra salvación.
(Continuará)
La diversión de los niños y niñas de hace casi 50 años era variada, mucho más que ahora, limitada a la TV y a las consolas y algún que otro juego esporádico de mesa o de muñecas “fashion”. Eso sí, la de los niños diferían sustancialmente de la de las niñas.
Los juegos de los niños solían tener un componente violento y, a veces, incluso cruel. Vamos a citar alguno de ellos:
. La taba: La taba es el hueso conocido como astrágalo. Era de ganado ovino y tenía 4 partes: hoyo, tripa, verdugo y rey. Se practicaba entre varios jugadores y ay de aquel que cuando tiraba el hueso le salía tripa. El rey, que había conseguido la “corona” gracias a una afortu
nada tirada, ordenaba al verdugo que le golpease con la correa en las manos colocadas juntas haciendo un hueco con los pulgares pegados. Generalmente se pedía que el correazo sonase, caso de no hacerlo, el verdugo perdía su privilegio y pasaba al golpeado. Otra "tortura" era “la toalla” que consistía en frotar con la correa en el cuello del desgraciado jugador con fricción apasionada. Normalmente jugábamos en el rellano de la casa del tio “Sardinero”, frente a la escuela, donde venía “El Escalera” de Bárboles a cortarnos el pelo.. Las vacas: Un muchacho hacía de vaca y el resto tenía que evitar ser “corneado” en el culo con los palos que portaba en sus manos. El moratón duraba varios días si te pillaba la “vaca”. Benito Fornier, “El Chico Malo”, hacía casi siempre de temido pitoneador. El lugar solía ser junto a los Ayuntamientos y las ventanas del entorno, nuestra salvación.
(Continuará)
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