BLOG DIVULGATIVO

domingo, 2 de junio de 2013

HECATOMBE

Ya está confirmado el aciago destino que comenzó a vislumbrarse semanas atrás, aceptado como el único posible tras el ridículo desplegado por el equipo en el Benito Villamarín. El Real Zaragoza es nuevo equipo de la Liga Adelante. Sin eufemismos, de la Segunda División. Un total de 15 jornadas sin ganar, La Romareda convertida en un fortín excesivamente asaltable y la insistencia por desaprovechar oportunidades para escapar del fuego han sido suficientes para que el conjunto dirigido por Manolo Jiménez dé con sus huesos en un nuevo descenso, el tercero en prácticamente un suspiro.
Pero más allá del desagradable resultado, lo único realista es que el Real Zaragoza no puede seguir ni un minuto más de esta guisa. Decía Manolo Jiménez en la previa al choque frente al Atlético que una ciudad como ésta no merece un equipo así y no le faltaba razón. Empezando desde el propietario, Agapito Iglesias, pero tampoco nos podemos olvidar de señalar a cuerpo técnico y jugadores, incapaces de frenar una debacle que, como los malos estudiantes, se ha dejado para última hora sin encontrar éxito.
El zaragocismo como masa social debe plantarse y clamar a los cuatro vientos que no puede más. Sin violencia, por supuesto, pero tiene todo el derecho del mundo a criticar la gestión de un hombre que, más que su empresa, parece estar maltratando un juguete comprado por capricho en Navidad. Del que te cansas pronto y quizás termine escondido en la esquina del trastero. Comenzó la temporada proclamando un supuesto paso atrás, pero lo cierto es que nunca ha dejado de manejar desde la sombra la entidad de la que es máximo accionista.
¿Y ahora qué? Se preguntan muchos. Después de mucho jugar con fuego, el equipo se ha quemado. Además, el Real Zaragoza ha agotado la bala importante de Manolo Jiménez. El andaluz ha reconocido en muchas ocasiones que el banquillo de este club desgasta mucho y no ha sido tampoco una campaña fácil, propiciada esta situación en parte por sus declaraciones. Tampoco nadie puede engañarse ya con la palabra “proyecto”, porque no lo habrá nunca con Iglesias al frente. Se avecina un verano largo, muy largo, y en Primera o en Segunda, el objetivo primordial debe ser recuperar la dignidad perdida.
(Editorial de www.aragondigital.es).

No hay comentarios: