MUERTE DE ISABEL

 Óleo de autor anónimo (S. XV) de Fernando II de Aragón e Isabel I de Castilla. En la actualidad se encuentra en el Convento de las Agustinas de Madrigal de las Alta Torres -Ávila-.

Tal día como hoy de 1504, Isabel I de Castilla agonizaba en Medina del Campo. Aunque se dice que murió de una hidropesía (cáncer de útero), lo cierto es que la pérdida de su hijo Juan y la de su amada hija Isabel, la habían sumido en una profunda depresión de la que no levantó cabeza.

Juan, que se había casado con Margarita de Austria, hija del futuro emperador Maximiliano I, murió en 1497 de tuberculosis. Isabel, viuda del príncipe  Alfonso  de Portugal – murió al caerse del caballo   en 1491-, volvió a casarse con el rey  portugués

Manuel I “El Afortunado”, muy a su pesar, pues ella hubiese preferido tomar los hábitos. Sin embargo, los RR.CC., siguiendo la política matrimonial que les caracterizó, lograron convencerla. De esta unión nació en Zaragoza Miguel de la Paz, el que estaba destinado a gobernar la Península. Isabel murió tras el parto (23 de agosto de 1498).

Miguel de la Paz murió antes de cumplir los 2 años.

Así pues, Isabel I de Castilla(“La Católica”) y Zaragoza no estuvieron muy unidas. El recuerdo del fallecimiento de su hija y, más tarde el de su nieto, afectaron a la salud de la reina, no recuperándola en los años sucesivos. Isabel murió poco antes del mediodía del día 26 de noviembre de 1504. Fue enterrada, siguiendo su propio deseo, en el Monasterio de San Francisco de Granada y más tarde, sus restos fueron trasladados a la Capilla Real donde reposan junto a su marido Fernando II de Aragón, su hija Juana (“La Loca”) y su marido Felipe (“El Hermoso”), su hija Isabel y su nieto Miguel.