Hoy, cuando venía de hacer la compra he oído en un programa de la SER dedicado al sector primario la situación de los citrocultores. Según los intervinientes, este año les han pagado a 8 céntimos el Kg de naranjas y el coste de producción es de 15. Cuando vamos a comprarlas, pagamos unos 2 €. Estaban, como no, cabreadísimos. Han relatado que en muchas fincas han abierto las puertas de las fincas para que la gente de las localidades próximas fueran a coger las que quisieran, pues no les merecía la pena contar a gente para la recolección y que ya, en algunos sitios del valle del Guadalquivir y Cádiz y en la zona valenciana, ya han arrancado los árboles o están a punto de hacerlo. Me ha recordado a Bardallur, cuando doy una vuelta por los caminos del río y veo campos de perales o manzanos arrancados por lo mismo que los citrocultores. Pronto, todo lo que comamos de hortofruticultura será de Marruecos u otros países. Una lástima.
1 comentario:
Y un peligro para la salud, la química usada en paises Terceros deja mucho que desear en cuanto a controles sanitarios. La cosa pinta mal para todos.
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