BLOG DIVULGATIVO

jueves, 29 de enero de 2015

REGADÍO





El preciado líquido es imprescindible para que la feraz huerta bardallutera produzca el alfalce, el trigo, el maíz, los melocotones, las manzanas, las peras, los tomates, los pimientos, las patatas, las pencas, las borrajas, las judías verdes, las cebollas, los ajos...El agua, distribuida a través de azudes, acequias, rasas...procedentes del río Jalón y del embalse de La Tranquera no solo regaba los campos, también era necesaria para el consumo humano y el ganado que, a través de pozos repartidos por la población y en los caminos, abastecía las necesidades de sus moradores. Recuerdo que en muchas casas había un carretillo especial con dos ruedas y  un armazón de madera con cuatro huecos para introducir las  cántaras. Una pocas casas -la mía, pues al lado estaba el horno-  poseían un pozo propio y dos o tres, tenían agua corriente mediante depósitos en lo alto de las viviendas.

(En las imágenes de arriba, el Jalón cerca de la Arboleda del Paso y, en las de abajo, la acequia  Grande y el pozo, con su abrevadero para el ganado,  que existía en el camino de la Alberquilla, frente a la fábrica de aceite).

No hay comentarios: