Resumen: La primera experiencia de las mujeres españolas en unos comicios generales ha recibido escasa atención por parte de los/as historiadores/as profesionales. Normalmente se ha defendido que la orientación mayoritaria de sus votos, al ser consideradas las mujeres españolas como conservadoras y católicas por excelencia, fue un factor fundamental para que se produjese la victoria de las derechas en las elecciones generales de finales de 1933. Este artículo pretende demostrar empíricamente que, aunque las mujeres españolas no hubiesen votado, el giro conservador que tuvo lugar en los resultados de las elecciones de 1933 se hubiese producido de todos modos, debido a la evolución previa del electorado masculino y a la concatenación de factores en la coyuntura que perjudicaban a las opciones políticas de izquierda.
Se sea partidario de una u otra tesis, conseguir que las mujeres pudiesen votar mereció la pena.
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Resumen: La primera experiencia de las mujeres españolas en unos comicios generales ha recibido escasa atención por parte de los/as historiadores/as profesionales. Normalmente se ha defendido que la orientación mayoritaria de sus votos, al ser consideradas las mujeres españolas como conservadoras y católicas por excelencia, fue un factor fundamental para que se produjese la victoria de las derechas en las elecciones generales de finales de 1933.
Este artículo pretende demostrar empíricamente que, aunque las mujeres españolas no hubiesen votado, el giro conservador que tuvo lugar en los resultados de las elecciones de 1933 se hubiese producido de todos modos, debido a la evolución previa del electorado masculino y a la concatenación de factores en la coyuntura que perjudicaban a las opciones políticas de izquierda.
Se sea partidario de una u otra tesis, conseguir que las mujeres pudiesen votar mereció la pena.
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