ENLACE

Tal día como hoy de 1469, es decir, un 19 de octubre, Isabel de Castilla y su primo Fernando de Aragón contrajeron matrimonio en el Palacio de los Vivero de Valladolid. Ella tenía 18 años y él, 17. Su luna de miel la pasaron en el Castillo de Fuensaldaña. El enlace se hizo en secreto pues no contaban con la dispensa papal que se requería para poder casarse con alguien de la familia –los abuelos de ambos eran hermanos- y estuvieron en grave riesgo de excomunión.

El arzobispo de Toledo falsificó la bula, pero, no fue hasta tres años más tarde, cuando el Papa Sixto IV extendió la bula pontificia el 1 de diciembre de 1472 que hizo legalmente canónico el matrimonio. El documento fue entregado a los príncipes en propia mano por Rodrigo Borgia, principal impulsor del mismo, legado del Papa, cardenal de Valencia y futuro Alejandro VI en 1492. Como agradecimiento, Fernando, ya Fernando II de Aragón, le concedió en 1485 el ducado de Gandía para su hijo Pedro Luis. Y como contraprestación, Rodrigo, una vez elegido Pontífice, otorgó a los monarcas el título de “Católicos” para diferenciarlos del título de “Cristianísimos” que ostentaban los monarcas franceses.