LAS 5 ROSAS DE MALLORCA (1)

En los primeros días de declararse la Guerra Civil en España, los militares sublevados se hicieron con el control de las Baleares, excepto Menorca.  Pese a los bombardeos sobre Palma de Mallorca el 23 de julio y la toma de Cabrera por milicianos anarquistas, los rebeldes resisten, lo que propicia que se inicie una expedición republicana para controlar las islas. El 2 de agosto, fuerzas armadas a cuyo frente se encontraba el capitán hispanocubano Antonio Bayo, desembarcan en Menorca como paso previo para la ocupación de Mallorca. De nuevo es bombardeada Palma y los responsables de la sublevación al mando de Alfonso Zayas y Bobadilla, jefe de la Falange, envían emisarios a Italia para pedir ayuda a Mussolini.

El día 7 de agosto, los milicianos se hacen con Formentera y la columna de Bayo controla Ibiza un día después. Desde el cuartel general establecido en Mahón, se prepara el desembarco en Mallorca que comenzará el día 16 de agosto. Desde Roma había llegado la ayuda solicitada por los sublevados y tropas fascistas de los "camisas negras" y oficiales del ejército regular, al mando del conocido como "Conde Rossi", se habían incorporado a la defensa de la isla. "Rossi" logra embaucar a más de dos mil voluntarios falangistas e, incluso, forma una especie de pequeña fuerza de choque conocida como "Los Dragones de la Muerte" -ya explicado más abajo-. Lo cierto es que, a pesar de la superioridad republicana en hombres y fuerzas aéreas y marítimas, los fascistas causan graves daños a sus rivales y provocan el reembarco de la columna de Bayo en la noche del 4 al 5 de septiembre, dejando tras de sí, cientos de cadáveres y pequeños contingentes de heridos y personal sanitario que serán apresados y fusilados de súbito, como decía el "León de Son Servera"; es decir, el fanfarrón y asesino psicópata italiano Arconovaldo Bonaccorsi, el "Conde Rossi".

Bonnacorsi (sin gorra) junto a otros mandatarios de las islas en un desfile. A la derecha, de lado, Alfonso Zayas y Bobadilla,  marqués de Zayas.