La base de este plato es la berenjena frita en rodajas, pero yo, para que no resulte aceitosa, la hago a la plancha. Antes, he preparado el sofrito habitual (ajo, cebolla, pimiento) y luego he rehogado la carne (ternera -1/2 Kg- y cerdo -1/4 Kg). La original se hace con carne de cordero. Cuando ya estaba todo mezclado y cambiado de color la carne, he añadido una lata de tomate triturado, un poco de azúcar, sal, canela y, el secreto, cominos. No le he puesto vino para que no saliese ácido. También le he dado mi toque de cayena molida. En una fuente de horno he colocado la mitad de las berenjenas y por encima, la carne. Después la he cubierto con el resto de las berenjenas. Ahora toca la bechamel. Se añade por encima cubriendo bien lo depositado en la bandeja y añado un poco de nuez moscada y pimienta recién molida. Un poco de queso y al horno para gratinarlo. Listo.
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