Ayer fuimos a Chiclana a comer en casa de Susana y Álvaro. Tuvimos problemas para llegar, pues hubo un accidente y las retenciones eran kilométricas. Al fin, tras una hora y media llegamos directamente a un bar que paramos siempre y que se llama "La Marisquería". Nos gusta parar, sobre todo, para saludar al "Joaqui", un cocinero del establecimiento que conocemos de cuando trabajaba aquí en El Puerto. Es un gran restaurante entodos los sentidos y el género que trabaja es de primerísima calidad. Todos los fines de semana se lena a tope y no es muy barato que digamos, pero la calidad se paga.
Ya en casa de mi cuñado, Susana, magnífica y atrevida guisadora, nos obsequió con un magnífico arroz asiático...
unas suculentas empanadillas de carrillera,
un paté con queso de cabra y manzana excelente,
una sabrosa tortilla de puerros y bacalao y...
un extraordinario y exquisito cebiche de dorada.
Los dulces los llevamos nosotros de una pastelería polaca que hay debajo de casa. (Falta una trenza).
2 comentarios:
Pasamos una jornada magnífica. Sólo Raulito, con su Argentina perdiendo ante la bien guarnida, tuvo un bache; pero se repuso pronto.
ál.-
Y todo esto lo hizo ella sola??? Enhorabuena a la cocinera!!!! Y a los comensales q tuvieron la suerte de comérselo.
CMarin
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