ACLARACIÓN

Quiero aclarar, mediante esta entrada, que no soy vegetariano, ni vegano, ni antitaurino, ni anticaza, ni pertenezco a PACMA, ni a organización alguna relacionada con la defensa del mundo animal. Pero sí estoy en contra de que se subvencionen con dinero público los festejos taurinos, como en Andalucía que, por exigencia de Vox, se sufraga con el erario público el 75% de las corridas con el pretexto de aliviar a las entidades locales y a la caída del sector -ya que hablamos de ayudas, también estoy en contra de que se subvencione a las cofradías de Semana Santa-.

En cuanto a la caza, aquí cada uno va por libre en cierta medida. Existe una ley europea, una nacional, cada comunidad autónoma tiene la suya e, incluso, algunas localidades, sus propios estatutos. Es decir, hay un cierto descontrol que debería regularizarse.

Si hablamos del maltrato animal, no es lo mismo el comportamiento con  los salvajes, que con los domésticos. Mientras el Código Penal no castiga el maltrato a los primeros, sí a los segundos, pero con penas máximas de 18 meses, lo que evita en el 99% de los caso ingresar en prisión. Pagas una multa o te declaras insolvente y te vas para tu casa tan tranquilo. En los países de nuestro entorno, las penas son de varios años de prisión. El caso del dueño de un caballo de carreras que lo mató por haber perdido una de ellas y que fue condenado a 15 meses de prisión llegando a entrar en la cárcel, fue un caso inusual, aunque salió a los pocos días. Matar zorros, lobos...y subirlos a la red, es algo bastante habitual. Las penas, por tanto, deben endurecerse para evitar este tipo de atrocidades.